• Varias asociaciones y vecinos del barrio Alcalá de Chorrillo protestan ante la inminente apertura de un comercio que permanecerá abierto hasta las 17.30 horas.

• Crónica gráfica de Pedro Enrique Andarelli para ALCALÁ HOY

“El barrio, las asociaciones culturales, FCAVAH, AMPAS de colegios e institutos y los presidentes de los distintos bloques de viviendas del barrio IVIASA, nos hemos unido para manifestar nuestra negativa a abrir una discoteca nocturna en un barrio residencial”, subraya la petición de la firmas que los vecinos de este barrio de Alcalá de Henares han abierto en la plataforma change.org.

Según explican, “un lugar de este tipo atraerá afluencia de público en horas de la madrugada, perturbando la tranquilidad y el bienestar de los vecinos. Por ello solicitamos al Ayuntamiento de Alcalá de Henares la denegación de los permisos de construcción y apertura de una discoteca, ya que consideramos que su ubicación debe ser en un entorno alejado de los barrios residenciales de la ciudad”.

Asimismo, sugieren la posibilidad de establecer mediante ordenanza municipal “la total prohibición o limitación de actividades de esta naturaleza” en determinadas zonas “cuando se sepa de antemano que generará diversos problemas de inseguridad, vandalismo, ruido, exceso de basura… » “La implantación de una discoteca en una zona residencial implica en todo momento una alteración negativa de las condiciones de los vecinos”, añaden.

Los vecinos con los que conversó ALCALÁ HOY explican que el nuevo local de ocio nocturno pretende abrir sus puertas en la planta baja de un edificio residencial, en el antiguo pub El Gallo, ubicado en el número 6 de la Avenida Doctor Marañón del barrio del Chorillo. Estos vecinos exigen al Ayuntamiento que tenga en cuenta el descanso y el bienestar de los vecinos, como ya hizo al denegar la licencia a la discoteca Carola Morena que estaba a punto de abrir en el barrio de La Garena.

La Ciudad responde

En relación a este asunto, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha informado que se trata de un local de 140 metros cuadrados, que lleva muchos años sirviendo de bar y, por tanto, tiene derecho a tener licencia de actividad. .

Los vecinos se reunieron con los técnicos y concejales del Municipio y estos aseguran tener toda la información disponible, incluido el expediente, para que sepan que se respetan las normas y que es imposible negar la licencia.

Negar la licencia sería cambiar algo sabiendo que alguien está interesado, y esto sería un delito de allanamiento. Incurriría por tanto en delito y ningún técnico o asesor del Ayuntamiento procedería en este sentido.

No obstante, la Administración Municipal anuncia que en caso de apertura definitiva del local, se realizarán controles exhaustivos por parte de Policía Nacional y Local para que no haya ruidos y problemas de aforo, así como para garantizar que se presta la actividad. adecuadamente.